Plagas del Maíz, Orugas fitófagas

Durante la campaña del maíz de 2024, se observó un daño considerable en los maizales de la provincia de La Coruña causado por orugas fitófagas. Como su nombre indica, son orugas que se alimentan de las hojas de las plantas y causan una gran defoliación que reduce en un buen porcentaje la cantidad de materia verde que cosechamos para los ensilados. Este factor ha sido un problema añadido a la devastadora climatología que con fuertes vientos y lluvias torrenciales arrasó las cosechas y puso en jaque a gran parte de las granjas que dependen del maíz para alimentar al ganado.

Evidentemente no podemos hacer mucho para cuidarnos del clima, bien así es importante allá donde sea posible seleccionar parcelas que estén protegidas por la orografía de los vientos dominantes de los temporales del Atlántico o bien que cuenten con barreras de protección como árboles o edificaciones que mitiguen la acción del viento. Lo que sí podemos hacer es trabajar para cuidar nuestros cultivos de las plagas que causan mayores mermas de nuestra cosecha.

En este artículo queremos poner el foco de atención sobre las orugas que se comen las hojas del maíz. Estas, si bien es algo a lo que ya estamos acostumbrados y asumimos su incidencia como algo normal, tienen un efecto importante sobre los rendimientos de tonelada por hectárea de materia cosechada. En una plantación normal en la que la incidencia de estas plagas está dentro de la media, podemos hablar de una merma de un 5% del peso verde, lo que puede suponer entre 1,5 y 2 toneladas por hectárea. 

Es especialmente común la acción de la oruga de la mariposa Mythimna unipuncta, también conocida como gusano soldado del maíz. Esta plaga puede causar daños significativos en los cultivo, afectando tanto la calidad como el rendimiento de las cosechas. Afortunadamente, existen métodos efectivos y sostenibles para controlar esta plaga, incluyendo el control biológico y el uso de variedades refugio.

¿Qué es la Mythimna unipuncta?

Mythimna unipuncta es una especie de polilla cuya larva se alimenta vorazmente de las hojas del maíz, dejándolas esqueléticas y afectando la fotosíntesis de la planta. Estas larvas son especialmente dañinas durante sus fases más jóvenes, cuando su apetito es insaciable.

El control biológico es una estrategia sostenible y respetuosa con el medio ambiente para manejar las plagas agrícolas. A continuación, se presentan algunos métodos efectivos contra Mythimna unipuncta:

1. Enemigos Naturales:

   • Escarabajos Carábidos: Estos escarabajos son depredadores naturales de las larvas de Mythimna unipuncta. Se alimentan de las larvas y ayudan a mantener la población bajo control.

   • Hongos Entomopatógenos: Bacillus thuringiensis (Bt) es una bacteria que produce toxinas específicas para las larvas de Mythimna unipuncta. La aplicación de Bt en los cultivos puede reducir significativamente la población de la plaga sin afectar a otros organismos.

   • Avispas Parasitoides: Especies como Cotesia marginiventris parasitan las larvas de Mythimna unipuncta, depositando sus huevos en ellas y reduciendo su población de manera natural.

2. Conservación de Enemigos Naturales:

   • Hábitats Favorables: Crear y mantener hábitats favorables, como setos y refugios, puede fomentar la presencia de enemigos naturales en los campos de maíz.

Medios Químicos Autorizados

Además del control biológico, existen medios químicos autorizados que pueden ser utilizados de manera complementaria para controlar Mythimna unipuncta. Es importante seguir las recomendaciones y dosis indicadas por los expertos para minimizar el impacto ambiental y evitar la resistencia a los insecticidas.

1. Insecticidas: Piretroides y neonicotinoides son algunos de los productos autorizados para el control de Mythimna unipuncta. Su aplicación debe realizarse siguiendo las instrucciones del fabricante y en momentos específicos del ciclo de vida de la plaga para maximizar su efectividad.

2. Rotación de Insecticidas: Alternar diferentes clases de insecticidas puede ayudar a prevenir la resistencia en las poblaciones de plagas. Es fundamental seguir un plan de rotación adecuado y consultar con los agrónomos locales para obtener las mejores recomendaciones.

No nos olvidemos de un asunto fundamenta: la aparición de resistencias. Una resistencia se genera cuando al utilizar un método de control, quedan vivos algunos individuos que por causas biológicas no se ven afectados por el método utilizado. Esto es como las personas cuando viene una epidemia de gripe y siempre hay a quien apenas le afecta mientras que otra gente se pone realmente enferma. Lo hemos visto recientemente con la epidemia de COVID-19. 

Ningún insecticida tiene una efectividad del 100%. Si aplicamos un producto que elimina el 95% de los individuos de una plaga, el 5% que sobrevive continúa en el campo y se reproduce, trasmitiendo su capacidad de resistencia a ese producto a un porcentaje significativo de su descendencia. Ahí ya tenemos un ejemplo simplificado de cómo y por qué algunos productos dejan de ser eficaces.

Para evitar la aparición de resistencias en las poblaciones de plagas, es crucial implementar áreas de variedades refugio dentro de las plantaciones de maíz. Estas áreas consisten en cultivar maíz que no está genéticamente modificado para resistir plagas en un porcentaje de aproximadamente el 20% de cada plantación, o en casos de no utilizar variedades resistentes a determinadas plantas, dejar zonas, preferentemente en la periferia de las fincas, en las que no aplicaremos los productos pesticidas permitiendo así que algunos insectos nocivos sobrevivan y se crucen con aquellos que podrían haber desarrollado resistencia. De esta manera, se mantiene la diversidad genética de las plagas y se previene la rápida evolución de resistencias.

¿Cómo reducir daños? los daños provocados por las plagas pueden ser mitigados fácilmente mediante tratamientos preventivos de bajo coste.. En el caso del gusano soldado, como de otros tipos de orugas (minadores, heliotis, etc.) la utilización de bacilus thuringiensis (BT) tiene una eficacia limitada aunque es cierto que puede ayudar a controlar las plagas en los primeros estadíos de su evolución. En el área en que nos movemos ya sabemos que tenemos el problema en mayor o menor medida, por lo que la aplicación de BT es adecuada cuando el tamaño de las plantas aún nos permite entrar en las fincas con maquinaria. Estas aplicaciones ayudarán a reducir la primera generación de orugas. 

Según estudios realizados bajo plástico para cultivo de pimiento (A. Urbaneja, J.Van der Blom, L. Lara, R. Timer, K. Blockmans) se ha conseguido parasitar mediante la avispa Cotesia Marginiventris hasta el 100% de la población de orugas bajo las siguientes dosis: 

A modo preventivo: 1 individuo por cada 10m2 de invernadero

A modo curativo: 2,5 individuos por cada 10 m2 de invernadero.

Claro que nosotros hablamos de cultivos extensivos al exterior, por lo que las dosis deben ser superiores, sin que haya podido encontrar ningún estudio serio al que remitirme para el establecimiento de las dosis adecuadas. No obstante, dado el proceso de caza que la cotesia marginiventris realiza para con las orugas en el cual se guía de señales olfativas de los compuestos segregados por las mismas durante el proceso de alimentación, cabe esperar una alta eficacia en su aplicación al aire libre.

La avispa actúa contra las orugas durante su tercer estadío de desarrollo, por lo que necesita, según su ciclo biológico de la acumulación de 340ºC/día para tal fin. Esto viene a ser un periódo de 30 días desde la suelta teniendo en cuenta una temperatura media de 15ºC/día. Debido a esto, es importante la aplicación preventiva antes de ver los primeros síntomas de defoliación en el maíz.

Conclusión

El control de Mythimna unipuncta y otras orugas filófagas del maíz requiere un enfoque integrado que combine métodos biológicos, la conservación de enemigos naturales, el uso de áreas de variedades refugio y la aplicación adecuada de insecticidas autorizados. Implementar estas estrategias de manera coordinada puede asegurar una producción sostenible y proteger nuestros cultivos de manera efectiva.

Para cualquier duda acerca de esta u otras plagas no dudéis en poneros en contacto con nosotros a través del formulario. Nuestro asesoramiento es gratuito y tiene como único objetivo la mejora de la producción agroforestal de Galicia.